Instagram

martes, 24 de julio de 2012

Mi viaje a Bretaña - Vitré

De Fougueres a Vitré solo hay 30 km por carretera nacional, en su mayor parte de largos tramos rectos, curvas y lomas suaves, paisaje amplio y verde, todo ello me recordaba el paisaje del estado de Filadelfia en los Estados Unidos, parecia que detrás de una curva ibas a encontrarte con el carro Amish o la niña con la cofia en bicicleta. Es curioso como lugares tan alejados conservan aún su genética de la ancestral Pangea. Estoy divagando ...

Entramos en Vitré por una calle estrecha y un poco pendiente, a los lados las casas se agolpaban unas a otras y sobre sus puntiagudos tejados aperecían impresionantes las torres del castillo, una pareja de ancianos en el balcón de una de las casas nos miraba pasar y la sensación era la de un caballero sobre su montura, entrando en un pueblo medival en dirección al castillo.





El Hotél Ibis Vitré estaba casi en el centro de la villa, con un amplio aparcamiento exterior y unas estancias muy agradables y elegantes a un precio mas que razonable. Al lado del hotél estaba el ubícuo McDonalds, lo cual siempre es de agradecer.

La habitación se convirtió una vez mas en improvisado tendedero ya que no hizo mas que llover durante el viaje. Una vez aseados nos dispusimos a dar una vuelta por la ciudad.






Plaza de la villa con la Iglesia de Notre Dame (gótico) al fondo.



Impresionante Castillo y muy bien conservado.







Una vez mas el reconocimiento a los heroes de la patria.









Repasando

Dándole vueltas a las cosas, leo eso de : "Shakespeare decía: Siempre me siento feliz, ¿sabes por qué? Porque no espero nada de nadie. Esperar siempre duele."

Anoche leia algo parecido: "No podemos controlar nuestros sentimientos pero si los pensamientos que los producen"

No se, son dos frases que tienen bastante sentido, pero que no siempre podemos conseguir que sean ciertas, sinceramente yo nunca esperé nada de nadie, por lo menos conscientemente, quizás cuando era joven si, y si que me dolió muchisimo, y aún me duele. Si que en momentos bastante puntuales fuí muy feliz pero tambien en otros muy desgraciado y eso sigue siendo así. Decía mi padre "de la vida sacarás lo que metas nada mas, o menos" y eso si que es totalmente cierto, yo en la vida siempre he tratado de ser lluvia en vez de ver llover, siempre he tratado de dar y no esperar nada a cambio, esa actitud simplemente me facilitó un poco la subsistencia.

Cuando le preguntaron a Woody Allen que opinaba de la muerte dijo: "Estoy totalmente en contra". Yo no, desde donde estoy ahora veo que si, que la vida realmente se hace cada vez mas corta, vamos aprendiendo a vivir cuando ya casi toca morirse, en ese momento quizás veamos con una sonrisa todo lo que fuimos y vivimos, todo lo que dejamos aqui.

jueves, 19 de julio de 2012

Mi viaje a Bretaña - Saint Maló

Saint Maló queda ya cerca de Dinan, algo mas al norte, será media hora rodando, lo primero como siempre era buscar el hotel ya que aquí ibamos a pernoctar y ponernos un poco mas cómodos y descansar un poco  pues llevamos todo el dia bajo el agua.

A la entrada de la ciudad en las glorietas se van indicando mas o menos los hoteles mas significativos, en este caso el Hotel que teníamos reservado era el "Formule 1 Saint Maló", por cierto que era mas caro que otros de la misma cadena, será por la localización mas turística. Habiamos intentado buscar otro hotel mas "digno" por un precio similar pero aquí además de estar todos a tope, todos salían mas caros. Bueno, pues el hotelito era sencillito pero limpio y bien, así que no hubo problema.

Una vez bajo techo nos quitamos todo lo mojado convirtiendo la habitación en un tendedero y yo personalmente recuerdo que empecé a ingerir todo lo que encontraba de comer por las bolsas, después a descansar un poco.

Luego vino la vueltina de rigor para conocer la ciudad. Como siempre preciosa, llena de gente y de tiendas para turistas y residentes.

Ahí van unas fotos de Saint Maló:





La ciudad está abarrotada de restaurantes en los que se ofrece todo tipo de mariscos, ostras, mejillones etc.



La Muralla que encierra la ciudad, llamada Intramuros, fue devastada en el año 1944, y con ella casi la totalidad de la ciudad. Tanto la Ciudad como la Muralla fueron cuidadosamente reconstruidos en su estilo inicial. Adentrarse en sus calles, es pasear por la historia, ya que parece no haber pasado el tiempo para Saint Malo.




Paseo sobre la muralla




La playa con la marea alta queda muy pequeña, con la marea baja el islote en el que se encuentra el Fuerte Nacional queda totalmente en tierra.


El Castillo de Saint Malo fue construido en el año 1424 por orden de los duques de la Bretaña, en 1498 se construyo la torre Quic-en-Groigne por orden de Ana de Bretaña y en contra de la voluntad de los habitantes de Saint Malo. Las torres, Des Dames y Mills fueron construidas algunos años más tarde. Hoy en día es el museo de historia de la ciudad y fue incluido en la lista de Monumentos Históricos en 1886.
 



La Catedral de San Vicente (Cathédrale Saint Vincent en francés) de estilo gótico y románico, fue construida en el siglo XII, y hoy en día es una mezcla de la antigua catedral y de la nueva, ya que ha tenido que ser restaurada en varias ocasiones.
 


Saint Maló cuenta con un importante puerto comercial de pesca, recreo y viajeros, desde el cual parten varios ferris hacia el norte de Europa.



El Fuerte Nacional (Fort National en francés) fue construido en 1689 por el ingeniero Siméon Garengeau, según los planos de Vauban y por orden del rey Louis XIV. Se construyó en un pequeño islote cerca de la costa, junto a las murallas de Saint Malo que lo defendía.


 


Este islote es accesible pié con la marea baja.

La Tigresa






Triumph Tiger 955i

Mi viaje a Bretaña - Dinan

Nuestro segundo dia de viaje ya amaneció lloviendo, nos pusimos los trajes de agua y salimos de Quimper por autopista en dirección Brest hacia el norte, para luego tirar hacia el este y el norte de nuevo hasta llegar a Saint Brieuc por carreteras nacionales, era el tramo mas largo del viaje, alrededor de 160 km.  aunque llovía el viaje fué muy agradable rodando entre 90 y 110 km/h., atravesamos muchos pueblos con grandes granjas y fincas con casas típicas de la zona, no había mucho tráfico, algún camión que dado que el itinerario era de bastantes tramos rectos con suaves lomas y curvas amplias no ofrecieron ninguna complicación.

A mitad del viaje paramos a desayunar en la cafetería de un centro comercial y a hacer alguna compra de comestibles y seguimos ruta. Llegamos a Saint Brieuc, seguia lloviendo, dimos una vuelta por la ciudad sin bajar de la moto y seguimos en dirección Dinan.

En Dinan dejamos la moto en un parquing subterráneo en el centro de la ciudad y nos dispusimos a dar una vuelta paraguas en mano a ver como era aquello.






De nuevo una ciudad preciosa, llena de Creperíes, turistas y tiendas de todo tipo ...



Dimos unas cuantas vueltas para ver si habia forma de comer algo que no sean Crepés y acabamos en una cervecería donde la pizarra decía que habian sandwiches "americanos", yo cometí la imprudencia de pedir uno, me trajeron una barra de pan llena de tacos de manteca y rebanadas de mortadela ....   :enfadado_rancio: Al final quité la manteca, partí la barra a la mitad y me la comí con la mortadela  :muy_enfadado: tuve que imaginarme que estaba de supervivencia una vez mas .... menos mal que la cerveza estaba buena.




Ya a media tarde recogimos a la Tigresa y pusimos rumbo hacia Saint Maló.
Instagram